El Embrujo (Doblado)

En la vida, las personas pueden vivir atormentadas por sus propios crímenes. Lo mismo también puede ocurrir en la muerte: espíritus enojados pueden quedar estacionados en el mismo lugar donde perdieron su humanidad. En la ciudad de Wilder, estado de Kentucky, se encuentra un club nocturno a orillas del río Licking, una de las pocas vías fluviales del mundo que corre siempre hacia el norte. El dueño del club, Bobby Mackey, siempre ha escuchado historias que hablan sobre cómo el río atrae asesinos y adoradores del demonio a la zona, como si fuera un enorme imán, y de que ha habido momentos en los que sus aguas se han tornado rojas porque ha corrido sangre en ellas. Bobby no cree en esas historias, ni siquiera después de que su esposa Janet y su empleado Carl se han convertido en blancos de ataques por parte de los muertos. En lo profundo de las entrañas del club, se encuentra un antiguo recinto, que servía de matadero, y que alberga un mal más antiguo que el edificio mismo. Cuando llegue el momento, ese mal despertará para atacar al bebé no nato de Janet y reclamar el alma inmortal de Carl.

¿Qué tan diferente podría ser nuestra realidad si no pudiéramos sentir y comunicarnos de las formas más convencionales? Para Marie, este es un tema que forma parte de su día a día. Su hija Julie padece una condición mental que la debilita, que no le permite caminar o hablar. Desde su nacimiento, Marie ha observado que Julie se comunica con cosas inadvertidas a simple vista, y se ha preguntado: ¿quizás se está comunicando con los ángeles, o con… algo más? Marie nunca se ha sentido amenazada por el comportamiento de su hija, hasta que se encuentra cara a cara con el demonio. Una sesión con un tablero de ouija convierte la casa de Marie en un portal para lo diabólico y la familia se da cuenta demasiado tarde de que el mal puede acechar en los lugares más comunes y a las personas más inocentes.

Algunas personas creen que los fantasmas son espíritus humanos que deben lidiar con asuntos aún pendientes y que quizás puedan necesitar la ayuda de los vivos, con el fin de encontrar la paz entre los muertos. Otros creen que los fantasmas pueden ser espíritus con rasgos no humanos, los cuales nos utilizan por razones muy distintas: para destruir todas las cosas sagradas y para robar nuestras almas. Jan sabe que Cody, su hijo de siete años de edad, es un niño solitario, por lo que no se preocupa cuando observa que él comienza a comunicarse con un amigo imaginario. Y Cody parece feliz. Con el tiempo, sin embargo, la personalidad de Cody se torna volátil. Jan teme que el amigo de su hijo sea algo que va más allá de la imaginación, cuando Cody le confiesa que éste habita en una caja roja que se encuentra en un cementerio cercano. Sintiéndose impotente y desesperada por proteger a su hijo, Jan contacta a un chamán nativo norteamericano, quien hace uso de oraciones y rituales ancestrales para ayudarla a luchar contra algo que es mucho más peligroso que un simple fantasma.

Deb y Tony acaban de comenzar su vida juntos. Con su primer hijo en camino, la pareja trabajadora se muda a una pintoresca casa en Atchison, en el estado de Kansas, con muchas esperanzas en el futuro. Pero luego de que su hijo nace, los juguetes del niño parecen cobrar vida propia. Deb está intrigada: ella cree que su hijo tiene un compañero de juegos de origen fantasmal. La curiosidad se transforma en horror cuando Tony comienza a ser atormentando con susurros extraños, pasos espectrales y heridas sangrientas que, al parecer, han sido causadas por el espíritu de una niña de siete años que falleció. Un espiritualista le advierte que esa niña no es la causa de la violencia desatada. Existe algo mucho más oscuro que reside dentro de su hogar y que controla a la niña muerta... y está desesperado por lograr también controlar a los vivos.

En la isla de Taiwán muchas personas creen que no existen fronteras entre el mundo material y el reino espiritual. Los fantasmas forman parte de la vida cotidiana. Cuando una familia norteamericana se muda a una lujosa mansión en las montañas de Yangming, ellos comienzan a ver y a escuchar cosas cuya existencia sólo puede considerarse como sobrenatural Aún así, esta familia bien instruida se niega a creer que haya fantasmas habitando en su casa... hasta que la hija más joven resulta poseída. La familia busca la ayuda de un sacerdote taoísta, quien les explica que esa casa fue diseñada para conceder poder a los muertos y para torturar a los vivos.

Se ha dicho que cada fotografía roba una parte del alma de un hombre. Entonces, ¿qué ocurre con todas esas partes cuando la persona ya ha fallecido? Lisa está fascinada con una foto enigmática del hermano de su novio que murió en la Guerra de Vietnam. A medida que su obsesión aumenta, la línea que existe entre los sueños y la realidad comienza a desvanecerse. En reiteradas ocasiones, Lisa de pronto se despierta con visiones vívidas del soldado muerto. Entonces llega a creer que la imagen posee vida propia. Cuando sus jóvenes hijas la abordan para relatarle historias sobre sus propias experiencias sobrenaturales dentro de la casa, Lisa se da cuenta de que el espíritu del soldado muerto está tomando el control de sus vidas.

Los niños a menudo se encuentran a merced del mundo de los adultos y, algunas veces, se sienten incapaces de influir en el curso de sus propias existencias. En ocasiones, pueden resultar atormentados por las complejidades de una vida que ninguna persona ha sido capaz de explicarles de forma satisfactoria. En una casa pequeña ubicada en Glenn Burnie, estado de Maryland, la vida de Billy Bean, un niño de 10 años de edad, ya está en crisis. Tanto él, como su hermana adolescente, son víctimas de ataques a mitad de la noche y son inmovilizados en sus camas por intrusos invisibles. Billy sabe que existe algo malvado que vive dentro de la casa y que poco a poco está destruyendo a su familia. A medida que los ataques comienzan a ser más fuertes, él hace esfuerzos por conocer los secretos de la casa en Little Road... y por combatirlos de cualquier forma posible, para salvar su cordura.

Con cierta indiferencia casual, el tiempo poco a poco va borrando los recuerdos del pasado. Las antiguas carreteras, alguna vez transitadas con cierta regularidad, resultan abandonadas y los lugares adonde se dirigían, pueden llegar a olvidarse. Cuando Clara y su familia se mudan a una casa pequeña en la zona rural de Hinsdale, en el estado de Nueva York, todos están ansiosos por alejarse del caos de la vida citadina... pero muy pronto descubren que su casa, nueva y tranquila, está llena de fenómenos perturbadores. Escuchan el sonido inexplicable de cantos rituales que provienen de algún lugar escondido en las profundidades del bosque y los vecinos les relatan historias de fantasmas que deambulan por el bosque. Con el tiempo, la familia se da cuenta de que la paz de la llamada "vida campestre", es una simple ilusión... y de que la amenaza de muerte es muy real. Un espiritualista del lugar les explica que ciertos muertos inquietos se sienten atraídos por la casa... y por un horrible secreto escondido ubicado en un pequeño espacio del sótano.

Muchos espiritualistas creen que algunos lugares contienen una concentración tan alta de energía psíquica que resulta inusual. Debajo del suelo por donde caminamos, puede haber rutas invisibles que quedan impregnadas de los espíritus de personas que estuvieron en el lugar antes que nosotros... y algunas rutas aún son transitadas por espíritus que no han traspasado el umbral. En la superficie, la finca de tres dormitorios de Edd y Beth parece ser el lugar perfecto para criar a su hijo pequeño... pero unas pocas semanas después de mudarse, ellos descubren que no están solos. A pesar de sus enormes esfuerzos por mantenerse racionales, la pareja no puede ignorar lo que han visto con sus propios ojos: a un hombre de apariencia transparente, sentado en una de las habitaciones, el espectro difuso de una anciana de pie en la puerta de la entrada, y una neblina oscura y pesada suspendida sobre la casa... la cual que se hace más y más grande cada día. La pareja acude a un investigador de fenómenos paranormales, quien les confirma que entraron en guerra con el mundo de los espíritus, pues su nuevo hogar es un portal, el cual vibra con tanta energía negativa, que literalmente puede explotar en cualquier momento.