Reina De Corazones

Marlene, famosa modelo internacional, regresa a su ciudad natal, Salomon, después de muchos años. Ella le dice a su amiga que no ha podido olvidar a Santiago. Marlene y Katy necesitan cambiar una rueda pinchada, casi son atropelladas por el autobús en el que viajan Santiago y su hermano. Mientras tanto, en Salomon, Julieta y Federico se besan apasionadamente y hablan de cuánto se aman. Ramiro y Odilio se culpan

Marlene decide conducir hasta el lugar donde mataron a sus padres y allí descubre un pozo de petróleo. Marlene no sabe que Dolores, la mujer que la crió, murió. Corre hacia el cementerio e interrumpe el funeral. Todos la ven entrometiéndose ante Dios y llorando. De repente comienza a llover, todos se sorprenden. Los ojos de Marlene creen ver a Santiago mientras el resto de la gente celebra la lluvia y atribuye este milagro a Marlene. Está en shock cuando su amiga le dice que Santiago Porras está en la ciudad.

El padre Cervillo le dice a Santiago que no ha llovido en tantos años y le dice que es algo sobrenatural. Marlene visita a Ramiro y a su esposa, quienes la trataron muy bien cuando era una niña. Marlene se sorprende al ver que el hombre que ama, se convirtió en sacerdote. Nunca más podrá esperar el amor de Santiago. Katy la abraza tratando de consolarla porque comprende su dolor por completo

Se corre el rumor de que Marlene hizo llover con su presencia. El pueblo cree que Dios envió a Marlene y la llaman "Reina de Corazones". Santiago y Marlene argumentan y ella le dice que nunca había estado tan decepcionada en su vida, y lo echa de su casa.

Marlene camina hacia la iglesia. El padre Cervillo envía a Santiago a una de las salas de confesión. Marlene se arrodilla en la sala de confesiones y le pregunta a Santiago por qué se hizo sacerdote, no sabe qué responder. Marlene insiste en que Santiago debe responder a su pregunta, él le dice que lo que sucedió entre ellos se ha olvidado por completo hace mucho tiempo.

Marlene sale corriendo de la iglesia llorando. Todos comienzan a tirar piedras a Santiago. El alcalde cree que todos se están volviendo locos y decide apoyar a Santiago. Katy intenta convencer a Marlene de que abandone la ciudad. Mesalina trata de seducir a Santiago y se sorprende cuando el joven sacerdote le dice que se vaya porque no puede creer que una mujer joven y bella como ella pueda pensar tan mal de sí misma.

Mesalina ve la cantidad de personas esperando a que el sacerdote se disculpe con Marlene, o lo lincharán. Marlene sale y les dice a todos que lo que sucedió entre Santiago y ella fue solo un malentendido y les pide que le den su apoyo al sacerdote y al padre Cervillo. Marlene le dice a Ramiro que sus planes son recuperar la tierra que perteneció a sus padres. Fuera de la ciudad, Marlene y Katy hablan de Santiago, de repente Marlene ve a una niña en una zanja inconsciente.

Marlene lleva a la niña a emergencia. Yubitza se despierta y está muy feliz de ver a Marlene a su lado. Salomé se enoja cuando descubre por casualidad que Julieta Vargas lleva la otra mitad de la cadena del corazón de Federico. Santiago comparte su secreto de que es el hijo del hombre que lincharon hace años por el asesinato de los padres de Marlene Páez ... Mientras tanto, Federico y Julieta hablan de su amor y se besan apasionadamente. Virtudes atrapa a Julieta saliendo del lugar donde se encuentra con Federico.

Virtudes manda a Julieta de regreso a la casa, una vez más Federico se salva. Mientras tanto, Salomé se confiesa con Santiago y le cuenta un terrible secreto. Ramiro Vegas ordena al jefe de policía que investigue el robo en la oficina del alcalde y vigile a Marlene. Ella, mientras está sola en la casa de la iglesia, se escabulle en la habitación de Santiago.

Marlene en la habitación de Santiago descubre que todavía tiene una caja de madera que ella le regaló. Oye ruidos y se va. Marlene confirma sus dudas: el hombre que ama tanto, le miente para ocultar su amor. De pie frente al árbol donde habían asesinado a sus padres, Marlene le da a Santiago el anillo de compromiso que él dijo que le había dado a una persona sin hogar y dice "Tal vez esa persona sin hogar era yo. Nunca supiste cómo mentir", una vez dijo esto, ella se va y lo deja.

Marlene, convencida de que Santiago todavía la ama, decide investigar por qué le está mintiendo y por qué se convirtió en sacerdote. Federico confiesa a Santiago que está enamorado de Julieta. En la iglesia, Salomé está devastada por la culpa y le pide a la Virgen que se apiade de ella. Ramiro, consumido por la pasión, le dice una vez más que la necesita y Salomé le dice: "No quiero esto".

Marlene, trata de averiguar más sobre "el diablo", también conocido como el ejecutor de la masacre de la familia Páez. Fonseca y Santiago deciden continuar con su misterioso plan. Santiago le ruega a Marlene por su perdón. Marlene cree que está mintiendo. Ramiro y Virtudes y Odilo y Salomé están frustrados por sus apasionados intentos.

Mesalina, ve al sacerdote en la tumba del "diablo". Todos corren al cementerio para ver qué ha sucedido. Cuando Marlene ataca a Santiago por su comportamiento, se justifica diciendo que ella debe aprender la diferencia entre la venganza y la justicia. Santiago, sufriendo profundamente, le dice a Marlene que a pesar de su enorme amor por ella, su vocación religiosa es indiscutible. Odilo y Ramiro, al analizar este incidente, entienden que Flores podría divulgar el horrible secreto que los une.

Santiago le cuenta a todo el pueblo que los crímenes de Páez y Cruz resultaron en la división del pueblo. Él va a buscar a Flores a su rancho. Odilo aterrorizado por el crimen que acaba de cometer, mentiras. Santiago no sabe que Mesalina lo está siguiendo a la casa de Flores. Flores comienza su confesión, le dice que cuando era joven, junto con otros dos cómplices, asesinaron a la familia Páez. Santiago se sorprende al escuchar esto, está horrorizado por lo que esta confesión significa para él, lo que cambió totalmente su vida.

Espiritu Santo le ofrece a Marlene que trabaje con Salomon Oil, pero ella necesita guardar silencio. Santiago, desesperado, le dice a Espíritu Santo lo que Flores le contó y que a causa de este miserable, su vida se arruinó y tuvo que renunciar a Marlene. Después de tomar unos tragos, Santiago va a la casa de Marlene. Él ve la imagen rota que ella había recogido en la iglesia y le dice que él guardó la otra mitad. La sensación largamente oculta el uno del otro culmina en un beso intenso.

En la iglesia, Santiago le pide a Dios que lo ayude con su dilema entre el sacerdocio y el hombre. Mesalina entiende que Santiago es hijo de Fulgencio Cruz. Por la noche, Santiago se encuentra con Marlene en el pasillo de la iglesia, se disculpa por lo sucedido, pero él le dice que él también quería ese beso. Federico y Julieta están sufriendo. Odilo y Ramiro están preocupados si Flores todavía está vivo. Piensan que Santiago podría haberlo salvado. Santiago le dice a Marlene que cuando Misael Flores se recupere, aclarará todo. Flores hablará.

Santiago le cuenta a Marlene sobre su decisión de abandonar la iglesia. Odilo y Ramiro intentan hacer que Santiago les diga dónde está Flores, pero Santiago no confía en ellos. Marlene se siente muy culpable por la decisión de Santiago. Julieta y Federico discuten. Mesalina llega con la noticia de la muerte de Flores. Santiago, molesto por la muerte de Flores, camina hacia el altar para celebrar la misa donde desenmascarará a los alcaldes. Su introducción deja a los residentes de Salomon en estado de shock.

Todos los residentes de Salomon comienzan una gran revuelta. Marlene cuenta lo enojada que se siente hacia Ramiro que vive en lujo, gracias a la tierra de su padre. Santiago descubre a Mesalina bañandose en su habitación y le exige que deje de meterlo en problemas. Marlene va a ver a Santiago a la iglesia para agradecerle, pero terminan mostrando su fuerte amor y deseo. Después de que Marlene se va, Mesalina regresa a la habitación de Santiago y con un ataque incontrolable comienza a golpearlo, Santiago la retiene para no lastimarse, se aprovecha y lo besa apasionadamente.

Katy, una vez más, intenta persuadir a Marlene para que abandone el pueblo con ella, pero ella se niega. Santiago está muy perturbado con todo lo que ha sucedido últimamente y deja la casa de la iglesia para ir a la Guarida del Diablo. Ramiro va a visitar a Odilo para planear juntos una forma de deshacerse de Marlene, pero Odilo insiste en que quien realmente está interfiriendo en el negocio es Santiago. Ramiro está de acuerdo pero aún cree que Marlene representa peligro. Federico comienza a seducir a Anita para provocar más celos en Julieta y finalmente la besa.

Santiago y Marlene se encuentran bajo la luz de la luna, hablan sobre su pasado y que los unió. Katy regresa a Caracas, una vez allí descubre que la prima de Nena está hospitalizada por intento de suicidio debido a su ruptura con un seminarista de Caracas. Katy queda devastada cuando escucha el nombre: Santiago Porras. Odilo y dos policías arrestan a Santiago ya que Odilo hace creer que mató a Flores. Cervillo, desesperado por lo que le está sucediendo a Santiago, proclama que los alcaldes tienen sesenta minutos para liberarlo; de lo contrario, divulgará frente a todos en la ciudad los pecados de Ramiro Vegas y Odilo Santos.

Los alcaldes y sus esposas le piden a Odilo que libere al sacerdote, antes de que comience a hablar. Cervillo les informa que se acabó el tiempo, Odilo se rinde y va a la estación de policía para liberar a Santiago. Ramiro está decidido a sacar a Marlene del camino, recuerda vívidamente las veces que Marlene lo enfrentó y la forma en que lo arrinconó, ella representa demasiado peligro para él y él tiene que deshacerse de ella.

Ramiro está agotado pensando cómo deshacerse de Marlene. Ella, desesperada, corre hacia su auto y se aleja tratando de entender todo lo que le ha estado pasando. Los dos matones, contratados por Matute, la sorprenden en el camino para cumplir con su trabajo. Marlene está acorralada y sorprendida por estos hombres, quienes le aseguran que tienen un regalo para ella de Fulgencio Cruz.

Marlene está convencida de que Fulgencio Cruz tiene un heredero y ahora no tendrá tiempo para preocuparse por nada más que encontrarlo. Mesalina se encuentra con Santiago. Fuete, que la había seguido por curiosidad, tiene la oportunidad de escuchar a su prima confesarle a Santiago que todo lo que ella hace, lo hace porque lo ama.

Julieta le dice a su padre que a pesar del odio que hay entre él y Odilo, ella está enamorada de Federico. Santiago, le confiesa a Cervillo que él es el heredero de Fulgencio Cruz, y le explica la necesidad que tiene de limpiar su apellido, le dice que nunca ha sido ordenado sacerdote y que siempre ha estado enamorado de Marlene pero que ella no puede saber la verdad sobre él. En la iglesia, Santiago anuncia que va a renunciar a su puesto de sacerdote y se empeña en confesar toda la verdad de sus antecedentes.

Finalmente, el padre Cervillo se da cuenta de que si Santiago habla, el pueblo lo matará. Luisa Elena asegura que Santiago será destruido. Santiago visita a Marlene para decirle que ya nada puede separarlos. Mesalina va a la sacristía. y allí encuentra a Marlene y Cervillo; El sacerdote le informa que Santiago Porras se va a casar con la Reina de Corazones. Al escuchar la noticia, la joven se sorprende y no sabe qué hacer.

Espiritu Santo le dice a Santiago que ha sido víctima de un intento de asesinato, por lo tanto, él y Marlene están en peligro y deberían abandonar Salomon. Santiago rechaza esa idea y le dice que terminará lo que comenzó a hacer en esta ciudad. Julieta entra en la habitación de Federico para decirle que ha decidido tener un bebé con él, el joven, que ahora conoce los lazos que los unen, la rechaza con gran dolor.

Katy le informa a Marlene que la Compañía de Perfumes de Queen of Hearts ha rescindido el contrato y la está demandando por tener una aventura con un sacerdote. Federico culpa a sus padres por no contar nunca la relación real entre él y Julieta. Katy se cansa de consolar a Marlene por todo lo que ha sucedido. Las mujeres se sorprenden al escuchar que Santiago toca a la puerta exigiendo una oportunidad para ser escuchado.

Messalina se levanta y decide que hará que Santiago se olvide de Marlene. Los periodistas acosan a Marlene sobre el futuro de la Reina de Corazones. Cervillo se entera de que Santiago es el hijo de Solvencia. Julieta ha decidido entregarse a Federico, él lucha contra sus besos y caricias, intenta detenerla pero no tiene éxito. Ella le dice que no puede esperar más. Sin ninguna fuerza en él, cierra los ojos y se deja llevar.

Katy preocupada por la posible llegada de Luisa Elena a Salomon. Ramiro va a la casa de Marlene y le apunta con un arma. Katy entra y él finge estar muy triste por su condición. Marlene se despierta de una horrible pesadilla. Katy no puede controlarla, Santiago entra en ese momento y puede contenerla hasta que el médico llegue con otro tranquilizante. Ramiro le dice a Mosquera que deben ponerle cara al heredero de Fulgencio Cruz.

Santiago, llega a la casa de Marlene y encuentra a su prometida en estado de shock frente a un pedazo de roca con una nota que dice "usted es el próximo". Federico decide renunciar a Julieta y casarse con Anita para liberar a su padre.

Marlene cree que el hijo de Fulgencio Cruz está cerca pues Ramiro le dijo que realmente existe un heredero. Julieta interrumpe la estación de radio y empuja a Bartolo fuera del micrófono. Públicamente anuncia una vez más su amor por Federico y le pide que no ceda ante las amenazas de su padre. Ramiro indignado cuando escucha que su hija lo desafía en público.

Federico es el primero en llegar a la estación de radio y Julieta inmediatamente exige una explicación a su matrimonio propuesto con Anita. Marlene le dice a Katy sus sospechas de estar embarazada. Una brillante limosina llega al pueblo y ante los ojos de Katy, se bajan Luisa Elena y Nena. Solvencia le cuenta a Socorro sus sospechas de que Marlene está embarazada justo cuando Santiago entra a la casa.

Santiago le cuenta a Marlene sobre su amor y que quiere casarse con ella. Marlene le dice que después de ver a Mesalina en su habitación, no podrá confiar en él. Santiago está desconcertado por sus recuerdos. Las palabras de Marlene y la advertencia de Katy de que Luisa Elena está de vuelta en la ciudad lo atormentan.

Luisa Elena aparece en la habitación de Santiago. Santiago no confía en ella porque ella ya intentó destruirlo una vez. Luego le informa sobre la participación que tiene en las acciones de Salomon Oil. Luisa Elena le cuenta a Marlene todos los detalles que Katy y Santiago le habían ocultado sobre la forma en que la prensa arruinó su reputación.

Santiago está interesado en saber sobre la reacción de Marlene cuando recibió los regalos. En la casa de Anita, algunas personas se reúnen para celebrar su matrimonio con Federico. Simona, que no fue invitada, aparece y, después de felicitar a Federico, le arroja el contenido de su vaso. Ella le dice que mientras él celebra su matrimonio, su amiga está acostada en una cama sin ganas de vivir. Virtudes va a buscar a Federico para ver si puede hacer algo por Julieta. Marlene y Santiago llegan al Club El Pozo, pero el portero les dice que no pueden entrar. Luisa Elena observa desde adentro. Santiago insiste en que tiene una reserva, pero el portero repite que tiene órdenes de no dejar entrar a Marlene.

Julieta, sufriendo el dolor porque Federico la dejó, cree que la traicionó al casarse con Anita. El joven le explica que hay razones por las que no pueden estar juntos, pero él no puede explicarlo. Marlene y Santiago llegan a un pequeño restaurante en las afueras de la ciudad. Ambos están demasiado vestidos en el lugar pero están muy felices de estar juntos. Santiago aprovecha esta oportunidad para darle a Marlene el anillo que ha elegido para ella. Marlene está totalmente feliz; ella finalmente siente que un hombre realmente la ama. Santiago entra en la "Guarida del Diablo" seguro de que va a encontrar a Mesalina allí. Él ve a la joven en lo más profundo de su tristeza y le agradece por hablar con Marlene. Mesalina sabe que Santiago no tiene nada más que darle, pero le pide que pase la noche con ella por el recuerdo.

Santiago llega a la "Guarida del Diablo" sabiendo que va a encontrar a Mesalina allí. Una vez que la encuentra, le dice que está agradecido por lo que le dijo a Marlene, que solo eran amigos. Por un momento parece que va a resistir su encanto, pero sucumbe a sus deseos. Ambos se unen en una noche de pasión y amor donde Santiago finalmente comprende cuánto hubiera amado a esta mujer si no hubiera conocido a Marlene primero. Siberina descubre que Julieta finalmente se ha levantado de la cama. Federico está de pie en el altar cuando llega la novia. Anita se baña con la luz de la mañana y Federico ve entrar a Julieta, se imagina que es feliz y se ve bailando con su amada, pero el sueño desaparece y la realidad se hunde. Mientras tanto, Julieta ha logrado salir de su casa y llora mientras ella Ve que Anita llega al altar.

Federico mira a Julieta desde el altar. La ceremonia se detiene mientras él debate sus sentimientos y Anita lo interroga discretamente. Todos los presentes esperan nerviosamente. Jean Paul, enviado por Ramiro, vigila la situación y ha logrado acercarse a Julieta sin llamar la atención. Luisa Elena visita la habitación de Santiago para aclarar lo que sucedió la noche anterior en el Club El Pozo. No presta mucha atención a la explicación de la mujer porque está claro que, después de todos sus esfuerzos, no pudo arruinar su velada. Federico y Anita se reúnen con sus amigos y familiares antes de partir en su luna de miel. El joven se despide de Patas y coloca una nota en sus manos para darle a Julieta. Después de que la pareja se va, Adriano hace lo que se le pidió. Una vez sola, Julieta lee la nota que dice que Federico todavía la ama. Ella no entiende las razones de su traición, pero tiene la nota cerca de su corazón.

Anita y Federico en el hotel intentan celebrar su noche de bodas. Llena de deseo, ella trata de seducir a su esposo y él se deja llevar hasta que ambos caen en la cama. Santiago llena la casa de su amada con flores y le hace una visita sorpresa. Desde lejos, Luisa Elena observa. Ramiro y Mosquera llegan a la oficina y verifican la foto de Fulgencio Cruz. Descubren el innegable parecido que existe entre el hombre de la foto y Santiago Porras. Luisa Elena le explica a Ramiro sobre su sensación de que Santiago tiene una obsesión por recuperar su tierra, y le asegura que puede destruirlo. Ramiro no confía en la seguridad de la mujer porque está seguro de que habrá complicaciones.

Luisa Elena está convencida de que todo lo que quiere Santiago Porras es el dinero de Marlene y esa es la razón por la que se va a casar con ella, por lo que le dice a Ramiro Vegas. Andueza está decidido a arruinar los planes del ex sacerdote. Mientras tanto, Odilio preside la boda civil. En la casa de Marlene, los amigos más cercanos de la pareja celebran la feliz unión. Por otro lado, Julieta, quien en su casa cree que ha perdido al amor de su vida Federico. Justo debajo de su ventana aparece Jean Paul, que está empapado por Julieta. Luisa Elena aparece en la casa de Marlene y allí capta la atención de la ex Reina de Corazones cuando dice que Santiago la conquistó de la misma manera que ella; porque hay un propósito: obtener la fortuna que ambos tienen. Mientras tanto, Santiago ante el altar está preocupado por el retraso de su novia.

Ante los ojos sorprendidos de todos los presentes, la ex Reina de Corazones entra a la iglesia. El susurro no tarda mucho en escucharse porque es obvio que hay algo mal. Santiago, ante el altar, quiere saber si todo está bien, sin imaginar nunca lo que sucederá después. cuando el padre Cervillo hace la pregunta de si hay algo o alguien que pueda dar una razón por la cual este matrimonio no debería suceder, la ex Reina de Corazones detiene la ceremonia, se quita el velo y se lo arroja a Santiago. Solvencia no puede desnudar a su hijo para que muera después de que ella lo haya recuperado. De repente, los militares llegan a la ciudad y la toman para rescatar a Santiago y Mesalina de las llamas. La gente del pueblo huye para ponerse a cubierto, Ramiro Vegas es el primero que debe enfrentar al Capitán León.

La indefensa Marlene recibe una visita de Luisa Elena Andueza, quien viene a terminar lo que comenzó. En el pasillo, Katy y Fuete esperan noticias sobre la condición de sus amigos sin saber que dentro de la habitación la antigua Reina de Corazones está siendo drogada. Después de inyectar algo, Luisa Elena corta el cabello de Marlene y continúa haciendo todos los arreglos para transportarla fuera de allí. De vuelta en la ciudad de Salomon hay una calma asombrosa. En la clínica, Santiago llama a su amada. Mientras tanto, Juvenal escucha de los labios de su hija el hermoso amor que siente por Porras, por eso no le importaba arriesgar su vida, pero tampoco pensaba en el dolor que esto causaría a sus seres queridos. En la cama de un hospital encontramos a Marlene atada a la cama con un aspecto débil, su cabello ha sido cortado. La ex Reina de Corazones se despierta de una pesadilla para entrar en un mundo de horror.

Atada a una cama de hospital, encontramos a una débil Marlene despertando en una nueva pesadilla. Mientras tanto, en la oficina del hospital Luisa Elena la está registrando como su hermana con graves problemas de personalidad. En la habitación, Elsa, una enfermera que trabaja allí, y Marlene se encuentran por primera vez. Marlene no sabe por qué está allí y se niega a tomar pastillas. Mesalina, acompañada por el Capitán León, va a la clínica para ver a Santiago. Espíritu Santo no cree que la joven deba ver a Porras. Pero Mesalina decide esperar, esto despierta la curiosidad del Capitán sobre el amor que esta mujer siente por Santiago, un amor que la hace arriesgar su vida y todo. Mesalina no explica, quiere cuidar a Porras y está dispuesta a esperar. Odilio es destruido por la cruel verdad: Federico, su orgullo y alegría, no es su hijo sino el hijo de su peor enemigo. Esto arruina la relación de los Santos.

Marlene, fingiendo ser Sarah, se gana la confianza de Elsa. Cuando la enfermera no está prestando atención, Marlene se hace cargo de la situación y exige ser liberada de este horrible lugar e insiste en que ella es Marlene Páez Prince. Fuete se niega a creer que su prima Mesalina sea responsable de lo que sucedió en la boda. Katy informa a las autoridades de la desaparición de su amiga. Mientras tanto, Marlene sufre de un fuerte dolor de estómago. Elsa y Brigida se sorprenden al saber que la joven ha tenido un aborto natural. Marlene tiene un dolor terrible. Este dolor crece aún más cuando comienza a creer que Santiago es responsable de que e lla esté en ese horrible lugar. Andueza le dice a Santiago que no sabe dónde está Marlene, Santiago le promete que encontrará a su esposa y que si ella tuvo algo que ver con su desaparición, él la hará pagar.

Marlene conoce a Ismenia, quien se convierte en su amiga y confidente durante sus días de cautiverio. Mesalina recibe un hermoso ramo de flores del Capitán León. La joven va a la oficina del capitán para agradecerle y también para interceder en nombre de Silencioso, que está en la cárcel. Santiago investiga en el hospital donde se vio a Marlene por última vez, recibe información que lo lleva a la institución mental. Marlene y Santiago, sin saberlo, están a solo unos pasos el uno del otro. La ex Reina de Corazones está aturdida por la medicación, pero trata de encontrar a su amiga Ismenia, la misteriosa mujer que comparte este infierno con ella y que ocupa la celda junto a la suya, lo que descubre es que Santiago habla muy cordialmente con el director.

Marlene cree que Santiago es responsable del infierno que está viviendo, especialmente ahora que lo vio hablando tan amigablemente con el director de la institución mental, ella se derrumba. Anita responde las preguntas de su amiga sobre su felicidad con Federico. Mientras tanto, Federico le dice a su amigo lo infeliz y el desastre que es su matrimonio. Federico no ha podido olvidar a Julieta y ahora está atormentado por la presencia de Jean Paul en su vida. Mesalina no puede ocultar el inmenso dolor que siente ahora que cree que no tiene esperanza con Santiago. En su soledad, Silencioso, que siempre muestra su ternura, la rescata y trata de consolarla. Consumido por su dolor, Santiago va al bar para ahogar su dolor en alcohol. Mientras tanto, la ex Reina está en pánico y muere de asco cuando las ratas que viven en la institución visitan su celda impulsada por el olor a comida.

en el manicomio, Marlene está aterrorizada ante la compañía de las ratas; la cruel Elsa entra y le hace entender que es ella quién manda allí. Con el propósito de darle celos a Fede, quien está acompañado de su esposa, Julieta ha ido al cine con Jean Paul. Ramiro y Salomé se miran alarmados ante la llegada de Odilo, quien luego de buscar consuelo en la iglesia, va a enfrentar a su opositor. En casa de los Méndez Pí, el capitán León informa a Mesalina y a los padres de la joven sobre sus futuros planes en España y en los cuales desea incluir a la bella chica. Al tiempo que Santiago continúa mal, totalmente aturdido por la desaparición de su esposa. Luisa Elena, entra en la habitación de Porras quien está dormido por la borrachera, aprovecha de dormirlo con cloroformo y comienza a buscar por todas partes hasta que consigue lo que buscaba con tanto afán: la carpeta donde reposan los documentos de propiedad de las tierras.

Luisa Elena anota datos claves de los documentos de propiedad, para llevar a cabo su plan: despojar a la exreina de sus tierras. en la casa de Virtudes, Julieta en compañía de su amiga Simona, busca una razón lógica del por qué su amado no está con ella. Julieta aún torturándose por saber el motivo del alejamiento de Fede, le advierte a Siberina que está dispuesta a ser su amante con tal de no perderlo. En la clínica psiquiátrica, dos enfermeros en complicidad con Elsa, planean abusar sexualmente de la exreina de corazones. Mientras tanto, en Caracas, Germán participa a la Nena que buscará a Marlene Páez para resarcirla por todo el daño que le han causado y hará que ella y Luisa Elena le besen los pies pidiéndole perdón.

En la institución mental, Marlene se salva gracias a Ismenia, quien fingió tener un ataque precisamente en el momento en que los enfermeros iban a violar a la ex Reina de Corazones. Luisa Elena le asegura a Las Vegas que esa misma noche celebrarán la compra de la tierra petrolera. Brígida le indica a Elsa que traslade a todos los pacientes al jardín porque van a exterminar a las ratas. Mientras tanto, Marlene se horroriza cuando ve la mano de Ismenia llena de sangre.

En el jardín del centro médico, Brígida luego de darle un punta pie en la mano a Marlene –para que suelte el tobillo de Porras- despide nerviosa a Katty y a Santiago ante el temor de que éstos descubran que se trata de la exreina de corazones. En busca de Julieta, Federico ha ido a la casa Vegas, pero es sorprendido por Matute, quien, en venganza por el tiro que éste le diera al confundirlo con Ramiro, le da una fuerte golpiza. Santiago, agradecido, ha ido a casa de los Méndez Pí para despedirse de Solvencia y de Mesalina; esta última luego de darle un beso sale corriendo a su habitación para no ver el momento de su partida. En la clínica, Marlene firma el documento que es realmente “la venta de las tierras a Luisa Elena” quien satisfecha, se retira prometiéndole a la exreina que pronto la vendrá a buscar.

Luisa Elena convence a Brígida que lo mejor para ellas es dejar a Marlene encerrada allí, pues ésta representa un peligro para ambas. Ante la preocupación que los agobia –por la situación de Federico- Odilo y Ramiro esperan a que Carmona termine de examinar al joven. En la habitación, el doctor se preocupa porque no hay respuesta a la prueba de sensibilidad en las piernas de Fede. la joven Andueza enfrenta a Espíritu Santo informándole que ella es ahora la dueña de la mitad de las tierras. Y para demostrarlo le enseña el documento de venta firmado por Páez. En la casa Vegas, Santos está sorprendido al saber que su sangre no es compatible con la de su hijo. Mientras que Ramiro, tenso, sugiere a Carmona que prueben con su sangre.

En la sala de juegos del manicomio, Elsa conduce a Marlene, quien se deja llevar de manera dócil. Ismenia al verla se alarma porque supone lo que le hicieron y lo que pretenden. Es por ello que decide planear una huida con su amiga para salvarla. Simona seduce a Adriano, en un intento por saber sobre “el supuesto embarazo de Anita”. Patas Blancas -molesto- le revela que Federico nunca ha tocado a su esposa, ni siquiera en la luna de miel, porque él sigue enamorado de Julieta.

En la celda de la exreina, Ismenia, después de cerciorarse que Elsa está inconsciente, le quita el llavero y saca a Marlene de la habitación. Ambas nerviosas corren por el pasillo decididas a escapar de aquel lugar. Ramiro le revela a su hija que su verdadero amor siempre ha sido Salomé y que de ese amor nació Federico; por lo tanto ella y el joven Santos son hermanos. Al llegar Santiago a Caracas se percata de la presencia de Mesalina, quien lo ha estado siguiendo. La fuga de Marlene e Ismenia queda frustrada por parte de Brígida quien aparece en el marco de la puerta acompañada por dos enfermeros justo cuando las mujeres se disponían a salir.

En el manicomio, la temible Elsa golpea -de manera brutal- con una correa a Marlene y a Ismenia. En la habitación de Luisele, ésta manipula a Germán, haciéndose la víctima. Él le advierte que ya sabe que fue ella quien internó a Marlene Páez en el sanatorio, pero la astuta mujer lo niega y culpa a Santiago de ser el responsable. Germán se presenta en la clínica psiquiátrica dispuesto a ayudar a Marlene. En Caracas, Santiago agradece a Mesalina, quien viene de bañarse, por trasmitirle sus ganas de vivir y su alegría. De pronto la mira tenso y se deja llevar por la pasión, la besa y acaricia hasta desatarle el nudo de la toalla dejándola desnuda. La joven reacciona, muy a su pesar, y le hace saber que no será de él mientras tenga en su corazón a otra mujer.

Germán -autoritario- se dirige a Marlene para hacerle entender que es él quien la va a ayudar a ser de nuevo “Marlene Páez Prince”, una mujer triunfadora, emprendedora y confía en que ella no lo defraudará. Con el paso del tiempo, Marlene se recupera y confía en Germán quien permanece a su lado protector. Él la pone al día en cuestiones de trabajo, viajes, inversiones, compras, etc. Ella luce fría e impenetrable, pero atenta a todo. Mesalina ha ido a visitar a su madre Zoyla, quien luego de recibirla amorosa, le reprime el hecho de ser la querida de Porras, ella le hace saber que él no es ningún hombre casado.

Juvenal, en su faena en la estación de bomberos, es sorprendido por la visita de su hija Mesalina quien insiste en hablar con él. Éste la ignora por haberse ido de su casa sin avisar. La joven Méndez Pí le informa que se va a casar con Santiago y quiere que él, su padre, la lleve de la mano al altar. En la mansión Andueza, Germán entrega a su esposa las cenizas de Ismenia; además le informa que la doctora Brígida y la enfermera Elsa están en la cárcel. En Salomón, Mesalina comparte con Santiago la extraña sensación que siente: El miedo a perderlo ahora que está tan cerca de lograr su unión. Porras la calma, pues ni siquiera el recuerdo de Marlene Páez los separará. Tras pasar el día, en su habitación del hotel, Santiago confirma por teléfono la compra de la casa que le regalará a su futura esposa.

La esposa de Germán, al hablar por teléfono con Santiago, se identifica como su socia, pero sin revelar su nombre. Durante la conversación él le informa que se presentará a la recepción con su esposa. Marlene furiosa cuelga el teléfono y llena de ira tira objetos al piso. Odilo trata de animar a un Federico totalmente deprimido, quien sólo pide que lo dejen morir en paz, que su vida sin Julieta ya no tiene sentido. En Salomón, luego de llevar a Mesalina a que conozca la casa, Santiago es sorprendido por la noticia que le da Fonseca el cheque destinado a la compra de la misma fue rechazado por el banco. Mientras en la casa de Virtudes, ésta y Ramiro se enfrentan por ella haber aprobado el “supuesto” matrimonio de su hija con Jean Paul. En la mansión Andueza, Germán le expresa a su esposa que la transacción que ella hizo fue muy extraña y directa.

Mesalina se muestra celosa y desconfiada ante el gesto de la socia de su futuro esposo, éste trata de aplacarla. Virtudes, llora con rabia y miedo ante el acoso y la violencia de Ramiro quien le advierte amenazante que ni Odilo, ni nadie debe saber que él no es el padre de Julieta, porque de lo contrario la mata. Santiago y Mesalina se casan, él cierra sus ojos mientras le pide a Dios que lo ayude a olvidar, que permita que pueda amar y hacer feliz a Mesalina. La casa Santos se está quemando y Federico se encuentra adentro. La orquesta termina su interpretación y el último compás marca la entrada de la misteriosa mujer, seguida de dos guardaespaldas. Todos los presentes miran hacia la escalera quedando impactados al ver a la bella, y sensual mujer. Quien se muestra fría, dura, pero radiante.

Marlene se acerca arrogante a Porras y a su esposa, él aprovecha para agradecerle por el obsequio de la casa, aunque considera que fue desproporcionado su regalo. Ella, dejándolo con la mano extendida, le hace saber que aún hay muchas cosas que están por verse y por pasar. Simona le avisa a Juvenal del incendio, quien silencioso, luego de ser invadido por extrañas imágenes de una matanza, reacciona y entra a salvar a Fede, logrando su objetivo. en el Hotel Le Pozo, Sarah es sorprendida por el gesto de Porras al enviarle un bello ramo de flores. Ella ríe satisfecha pues él ya cayó en su trampa.

En la oficina, Santiago es sorprendido por la visita de Sarah, quien mantiene la distancia ante la decepción al saber que las flores él se las obsequió por agradecimiento y no por halagarla. No lejos de allí, Virtudes se torna nerviosa luego de saber que su hija le ha manifestado a Siberina que es hermana de Fede. Mientras que Ramiro no puede dejar de pensar en las palabras de su-exmujer cuando le revela que él no es el verdadero padre de Julieta.Haciendo caso omiso de las amenazas de Ramiro, Virtudes piensa revelar la verdad a Federico y a Julieta.

En su alianza contra Ramiro Vegas, Odilo presta atención a las convincentes palabras de Sarah, quedando sorprendido al saber que ella está dispuesta a financiar la mejor campaña electoral a favor de Marlene Páez, como gobernadora del Estado por Salomón del Conuco.  Luego de ser convencido por Sarah, que Marlene es la única persona que puede acabar con Ramiro Vegas, el Alcalde del Conuco accede a apoyar la candidatura de Páez. La noticia con el titular de: “Reina de Corazones a la Gobernación” ha tomado por sorpresa a los Salomonenses, entre ellos: Santiago, Katty y Sandra quienes tratan de ocultárselo a Mesalina, quien viene de medirse un traje de maternidad. Mientras que en la Alcaldía del Pozo, Ramiro le pide explicaciones a Luisa Elena, pues ella le aseguró que Páez había muerto.

En su habitación, Sarah le confía a Germán que el amor que sentía por Porras se convirtió en odio, y que lo destruirá de manera implacable.

En su casa, Santiago luce atormentado por los recuerdos de Sarah, desde el primer día que la vio en la recepción hasta los besos vividos esa noche con ella. Mientras que la mujer luego de secar sus lágrimas se sobrepone al dolor jurando, con un odio desmedido, que despedazará la vida de Porras, hasta el punto de no dejarle siquiera un solo pensamiento que valga la pena.

Tras sorprender a Sarah y a Santiago besándose apasionadamente, Mesalina -iracunda- agarra un objeto y lo estrella contra el piso, para luego lanzarse, como una fiera, sobre la mujer al tiempo que la insulta. Porras trata de detenerla. Sarah sale serena, satisfecha por su logro. El protagonista -avergonzado- le pide perdón a su mujer.

Tras sacar a Elsa de la cárcel, Sarah le hace entender que ahora debe pagarle esa acción trabajando para ella. En su casa, Mesalina está desconcertada luego de saber por Silencioso que él es Andrés Páez Prince, hermano de Marlene Páez. Luisa Elena es presa de un nuevo ataque de nervios. Tras ser torturada en su habitación por la aparición de Sarah como Marlene Páez, para que firme los papeles de compra-venta de las propiedades; similar documento al que ella le hizo firmar a Páez en el manicomio; se encierra en su cuarto con llave para evitar que la imagen de la exreina entre nuevamente allí a perturbarla.

Ramiro entra a la habitación de Luisele encontrándola en una crisis, en la que asegura que Páez estuvo allí obligándola a firmar los documentos donde le devuelve sus tierras. Vegas, pensando que va a ayudar a su mujer, hace entrar a la enfermera que la cuidará: se trata de la temible Elsa, quien al ver a la joven Andueza, de inmediato, en sus ojos brilla una chispa de odio y venganza. Ésta se mantiene inexpresiva, sin darse por enterada de quien es su paciente. Por su lado, Ramiro refleja su impresión ante el estado en que ha caído su mujer, quien va cediendo a los efectos del sedante que le inyecta la enfermera.

En la casa de Elsa, Sarah disfruta del espectáculo al ver el estado en que se encuentra su cuñada. Dueña de la situación la tortura para que firme el documento donde le devuelve las tierras, aclarándole que es Marlene Páez quien le pasa factura. Luisele en crisis se niega, ya que para ella la exreina de corazones está muerta. Sarah -dura- la reta a que la mire a los ojos y le diga si tiene cara de estar muerta. Luisa Elena la mira con pavor y desconcierto.

En un momento de pasión desbordada entre Germán y Sarah los besos y caricias preceden a la inevitable entrega. Mientras, Santiago una vez más es atormentado por los recuerdos de la única mujer, que en definitiva, es la que ama: Marlene Páez. En la suite, Germán -sorpresivamente- es rechazado por su esposa como reacción al ser acosada por sus pensamientos: de los momentos felices con Porras. Invadida por la intriga y desconcierto, Mesalina trata de atar cabos al enterarse por boca de Silencioso que Sarah está financiando la campaña electoral de Marlene.Entre tanto, en la casa de Elsa, Luisa Elena -dopada y de aspecto patético parecido al estado en que alguna vez estuvo la protagonista- firma el documento compraventa de las tierras que le presenta la imponente Sarah, luego de amenazarla con inyectarla de nuevo.

En una calle del pueblo, Federico está desconcertado ante la falsa indiferencia que Julieta le muestra al entregarle otra carta de su “admiradora secreta” en la cual ella acepta a la invitación que, con el fin de conocerse, él le hiciera por el mismo medio. En el calabozo, Mesalina le revela a Katty que Silencioso quien en realidad es Andrés Páez fue salvado por Fulgencio Cruz. Esto será un golpe para la exreina de corazones, pues el padre de Santiago no sólo es inocente, sino que además salvó a su hermano. Tras la preocupación de la joven Méndez Pí de perder su matrimonio, Katty la alerta de que su rival no es Marlene Páez sino Sarah de Andueza.

En el momento en que Luisa Elena se dispone a revelar a Santiago quien se esconde tras la personalidad de Sarah, la sirena de una patrulla la hace presa del terror. La mujer huye del lugar dejando el auricular tirado. Porras -impotente-cuelga el teléfono con furia.

Marlene y Andrés se ponen al día de su situación actual. Ella le confía sus planes de destruir a sus enemigos. Páez, al escuchar la voz de Lara y unos hombres, actúa como Sarah. Odilo reacciona molesto al saber por Virtudes que Ramiro ha encarcelado a Silencioso. En la Suite, Sarah, en la búsqueda de vencer al alcalde del Pozo, saca una chequera y lujosa pluma frente a Mosquera, quien impactado y nervioso escucha las terribles palabras de la mujer: ¿cuánto le va a costar la cabeza de Vegas? Luego de haber hecho el amor, Julieta y Federico están atormentados por una culpa devastadora. Fede -decidido- le confía que no quiere dejar de amarla, la abraza.

Santiago está incrédulo ante las palabras desesperadas de Luisele quien le ha revelado que Sarah de Andueza es la misma Marlene Páez. Porras cuelga -con rabia-  el teléfono ante la confusión que la noticia ha causado en él. En su oficina, Odilo está preocupado al saber por Sarah que Marlene no aceptará la negociación con Vegas.

Tras sonar una fuerte explosión, Mesalina en la oficina arrastra el pesado cuerpo de Porras quien está inconsciente. Gustavo, cubriéndose del fuego con una chaqueta, avanza hasta la pareja para cargar a Santiago hasta salir del área de peligro. La joven Méndez Pí trata de reanimar a su esposo, pero él no reacciona. Ella llora al creerlo muerto. En la alcaldía del pozo, Lara amenaza a Vegas con mostrar públicamente un documento donde prueba que él usurpó las tierras de Páez y Cruz, si vuelve a arrestar al joven Andrés. Le advierte que nunca trate nada en contra del joven. De pasarle algo a Silencioso la gente de la señora Andueza considerarían que fue él. En Salomón, Sarah en su intento por emendar parte de su error, retira la demanda en contra de Katty. Mientras en la casa parroquial, Santiago confía a Espíritu que Sarah no es una mujer malvada. Le asegura que la mujer va a tratar de reparar todo el daño que ha causado al saber que estaba equivocada. Porras le revela que ella es la propia Marlene Páez.

En la suite, Marlene se sorprende ante la confesión que le hace Germán, él es el primogénito de Fulgencio Cruz. Páez se siente traicionada y utilizada por su esposo. Con desprecio se dirige a él pidiéndole que no deje en la ruina a Santiago. Mesalina siente un dolor íntimo desmedido al confirmar por el médico que ya no será madre. Luisa Elena entra en la mansión Andueza con el fin de conseguir dinero para huir. Al abrir la caja fuerte se consigue con un delicado sobre el cual al leer su contenido descubre que Germán es hijo de Fulgencio Cruz.

En medio de la discusión, Germán, luego de aclararle a Santiago que ellos no querían matarlo ni hacerle daño a su esposa Mesalina, le informa que alguien le mintió con respecto a su supuesto padre,  ya que él no es hijo de Fulgencio Cruz. Porras, sin bajar el arma, trata de desentrañar por dónde viene esta nueva jugada. Ante la duda de Andrés, Solvencia le asegura que Santiago sí es hijo de Fulgencio Cruz. En el cementerio, el devastado Porras visita la tumba de su padre. Allí jura recuperar sus tierras al precio que sea. Entre tanto, en la casa de Marlene, Germán y su esposa llegan a un acuerdo para ayudar al exsacerdote. Dispuesta a todo por demostrar que Santiago es hijo de Fulgencio Cruz, Solvencia se entrevista con Germán. Andueza es tomado por sorpresa ante la noticia de que Solvencia es la verdadera madre de Porras.

Tras ver un anuncio de solicitud de obreros en la Corporación Andueza, Santiago se dirige a la oficina a entrevistarse con Sarah, quien -digna- lo atiende. La mujer se impacta al saber que Porras está interesado en trabajar en la cuadrilla de obreros de su empresa petrolera. Entre tanto, Germán se muestra contrariado ante la confesión de Solvencia, pues en el registro Santiago aparece como hijo de María Gracia Porras, no de ella. Andueza le confía a la profe, que él es el verdadero heredero de Fulgencio Cruz.

Marlene está estupefacta ante el detalle que recibe de su esposo debido al aniversario de bodas: un carrusel que en su niñez su padre Armando le regalara. Emocionada le pide que la bese. Santiago, que llega en ese instante, no puede evitar hacer una escena de celos al conseguir a los esposos entregados en un apasionado beso. Virtudes despide a Federico, pues teme que Ramiro al reaccionar atente contra él. Julieta, en su habitación, le confía a Simona que interrumpirá su embarazo, pues ese niño no debe nacer. Marlene llega para impedir la pelea justo en el momento en que Germán le da una cadena de golpes a Santiago quien cae derribado al suelo.

En el granero, Sarah después de separar de la pelea a Germán y a Santiago, advierte a éste último que lo contratará en su compañía a cambio de que los  hombres comiencen a trabajar para ella de inmediato. Además le recuerda que su labor será de “obrero de limpieza”.

Ramiro y Salomé, entregados a la pasión, hacen el amor. De pronto llega Odilo quien los sorprende. Enfurecido dispara contra los amantes. Salomé, en medio de un ataque de histeria, al ver el cuerpo de Vegas bañado en sangre cree que Odilo lo mató. Santos -violento- se le va encima a la desnuda mujer y la abofetea por traidora. Federico entra y evita que Odilo mate a su madre. Mientras María, la criada, llora al creer que el Alcalde del Pozo está  muerto. En el Galpón, hay gran expectativa entre los hombres al ver como Sarah se impone sobre Santiago, quien –obligado- se pone el uniforme. La mujer -firme- le hace entender que es ella quien manda. Mosquera disfruta la escena, pues no le agrada el protagonista. Porras asegura que esta será la última humillación que le aceptará a Marlene.

Tras los comentarios que hacen los obreros por el beso que Santiago  y Sarah se dieran en el Galpón, Porras -molesto- les advierte que si alguien llega a hacer un chiste o  cualquier crítica al respecto se las verán con él.  Mosquera que -casual- ha escuchado piensa revelar a Germán Andueza lo sucedido entre los protagonistas. En la Alcaldía del Conuco, Virtudes y Federico están alarmados al saber por boca de Siberina que Julieta se fue del pueblo, pues recogió todas sus ropas. Virtudes sospecha que se trata de una combinación de Vegas con Salomé para quitarle a su hija. Mosquera mira a Andueza simulando incomodidad, cuando en realidad está disfrutando la noticia. Germán se pone furioso al saber que Porras ha apostado dinero por besar a su esposa.

Luego de saber por boca de Germán que el beso que se diera con Santiago en el galpón fue utilizado por él para ganar una apuesta con los trabajadores, Sarah le da una bofetada a Porras retándolo a que se atreva a besarla de nuevo. Mientras, en Maturín, Ramiro se extraña ante la visita de Federico, quien llega en el momento en que la enfermera se disponía a bañar al paciente. El joven Santos, pagando su penitencia, se ofrece a hacerlo. Perencejo, quien ha ido a negociar la libertad de Odilo con Vegas, está escandalizado al sorprender a Federico cuidando al Alcalde del Pozo.

Conmovida ante el dolor de Santiago, Marlene se dirige al dispensario para ofrecerle ayuda a su amor. luego de agradecerle el gesto, le sugiere que se retire. No por malagradecido, si no, porque para él ella no vale nada. Ante las duras palabras de Porras, Páez queda afectada emocionalmente. Virtudes se muestra incrédula al saber por Perencejo que Federico es quien está cuidando a Vegas. Cuando entra el guardia con la comida el Alcalde del Conuco le da un golpe haciendo que el hombre caiga inconsciente al piso. Odilo le quita el arma y sale.

Ramiro está sorprendido ante su rival quien está decidido a matarlo. Santos, al tiempo que coloca el dedo en el gatillo, le advierte a Vegas que no permitirá que le arrebate a su hijo. Germán le confía a Sarah que se cuide de Santiago, pues no sabe hasta dónde él será capaz de llegar con tal de lograr lo que se ha propuesto: levantar de nuevo su fortuna. Santiago acude a Ramiro en busca de ayuda para evitar que la Corporación Andueza se quede con los terrenos de Zoyla. Vegas al saber, por boca de Porras, que esas tierras están repletas de petróleo piensa desde ya en el asunto.

Dominadas por un mutuo sentimiento de odio, Marlene y su cuñada se enfrentan. Luisele le advierte a la exreina que ha regresado para hacerle la vida añicos. Páez, llena de rencor, le da una bofetada propiciándose entre ellas una lucha a muerte. La noticia de la muerte de Andrés se ha esparcido rápidamente en el pueblo. Todos en la plaza lucen muy tristes. Sarah, ante el cadáver, jura que limpiará de criminales al pueblo. Revela que este asesinato le llega a ella directamente porque Andrés Páez era su hermano. Se levanta un rumor colectivo al descubrir que la mujer es Marlene Páez Prince.

Dayana se marcha desconcertada ante la actitud de su padre, al no querer que ella entre a la habitación donde él yace acostado sufriendo una de sus crisis. Andueza tiene sus brazos encadenados a la pata de la cama para evitar hacer daño.  Llora –impotente- suplicándole a Dios que lo libere de esa pesadilla. Mientras en la funeraria, Marlene está contrariada al saber por boca de Santiago que Mesalina ha perdido la memoria, pues ella es la única persona que puede aclarar la muerte de Andrés.

Tras ser apoyada por Virtudes y Odilo, Marlene -categórica- reafirma que ahora más que nunca luchará para ganar la gobernación; pues los enemigos de ella son los mismos de Salomón y alguien tiene que acabar con ellos. En el bar, Santiago bebe un trago mientras es atormentado por las palabras de Luisa Elena, donde le advierte que Germán piensa acabar con todos ellos, incluso con Páez. Bajo una tormenta, Federico, que se encuentra en el cementerio con Dayana, se sorprende al descubrir en las ruinas del panteón de Fulgencio Cruz, que en la urna de éste último sólo hay piedras en lugar del cadáver. En el sótano de la Diablera, al ver una figura masculina, Mesalina se sobresalta. Temerosa le pregunta quién es y en qué lugar se encuentra ella. El misterioso hombre le informa que está en una parte de su casa que por fortuna sólo él conoce.

En la Diablera, el misterioso hombre, confiando en Mesalina, le narra su historia revelándole que él era el hombre más rico, poderoso, asediado por las mujeres y el más envidiado de esa región; pero que un sujeto que lo odiaba le desgració la vida matando a su esposa y a sus tres hijos, además de intentar quemarlo vivo, muestra de ello es la quemadura en la mitad de su rostro. Pero fue salvado por una india que con sus cuidados hizo que se recuperara, para luego renunciar a todo y quedarse allí oculto, muerto para el resto del mundo.  Se trata de Fulgencio Cruz. Sólo hay una cosa a la que no ha renunciado, ni renunciará: venganza en contra del hombre que le robó su vida y sus sueños, Armando Páez.

Al anochecer, en la plaza de Salomón, Santiago es sorprendido por la voz de una mujer que lo llama. Se trata de Marlene quien temblando de pánico busca apoyarse en él. Le confía que tiene miedo y que él es la única persona en quien puede confiar, pues teme que Germán no sea el hombre que ella creía conocer. En medio de la conversación los protagonistas una vez más, entre besos, dejan en claro el amor que sienten el uno por el otro. Él le propone que finjan ser enemigos para tratar de descubrir el juego de sus adversarios.Tras el consejo de Fulgencio, Mesalina decide regresar a su casa. Cruz sólo le pide que no revele que lo ha visto, ni el lugar donde vive; asegurándole que un día se lo agradecerá con creces. Solvencia se impacta al saber por Santiago que en la tumba de Fulgencio sólo hay piedras, además que Mesalina dice estar con Cruz. Porras le pide que guarde silencio para él investigar, pues a su padre no le llamaban “el diablo” por nada. En la iglesia, al no encontrar la carta de defunción de Fulgencio, Santiago decide buscar a Mesalina para que sea ella quien le aclare lo de su acompañante.

En el sótano de la Diablera, Fulgencio -molesto- le advierte a su visitador que así como el petróleo le dio fortuna así mismo le quitó la vida. Por lo que ahora no entiende que después de tanto tiempo vaya a verlo y a hablarle de sus hijos. Se trata de Cervillo quien le informa que ya no puede seguir ocultándose, pues llegó la hora de enfrentar la verdad.

Marlene se alarma al saber por su esposo, quien manipula varias armas, que al caer la tarde resolverá en un duelo sus diferencias con Santiago, pues uno de los dos debe morir. En la casa de Santiago, Marlene -llorando- le suplica que no asista al desafío. En la Sacristía, Cervillo confía a Solvencia que existe una persona secreta que puede impedir que Santiago y Germán acaben muertos. El cura le pide a Dios un milagro para que esta persona recapacite y actúe. Mientras, Andueza se despide de Katty sin poder evitar darle un beso, que ella, luego de dudar, acepta. Marlene le suplica a Porras para que huyan de Salomón.

El duelo entre Germán y Santiago es interrumpido por un grupo de aterradas personas quienes vienen gritando que el diablo ha regresado. En la plaza todos están impresionados por la presencia de Fulgencio Cruz, quien recorre el lugar con la mirada hasta descubrir a sus hijos. Germán le explica a Marlene que ahora ninguno es dueño de nada, por la cláusula que existe en los documentos: con la muerte de Armando Páez todas las tierras pasaron automáticamente a manos de Cruz. Tras su conversación con Fulgencio, el capitán Léon da orden de arresto a los alcaldes de Salomón. Vegas y Santos están estupefactos al saber que sobre ellos pesa una acusación por incitar al pueblo a asesinar a un ciudadano inocente.

En la casa parroquial, Fulgencio le hace señas a Cervillo para que lo deje a solas con Marlene. Ésta le ofrece excusa por haberlo maldecido durante años al tiempo que le pide que no ensucie el nombre de su padre. Cruz le hace ver que Armando era un traidor y un asesino. Dispuesta a dar curso a su plan, Mesalina le sigue el juego a Matute quien, devorándola con la mirada, la invita a dar un paseo. Intenta acariciarla cuando de pronto la voz de Santiago lo detiene. En la habitación de Katty, la furia de un trueno hace que la joven se despierte sobresaltada. La puerta se abre abruptamente. Katty grita horrorizada. Aparece en el umbral de su habitación Germán. Transfigurado en una bestia incontrolable, como si se estuviera consumiendo por las llamas.

Marlene despierta asustada de una pesadilla. Se sorprende al notar que su esposo no está a su lado. En la Sacristía, Fulgencio le revela a Cervillo que con su llegada al pueblo se han despertado muchas cosas. Le hace prometer al cura que no deje que su hijo Germán entre a la iglesia. La lluvia se ha desatado en medio de truenos y relámpagos. Katty muy tensa sostiene entre sus manos un candelabro con una vela encendida, pues hay una falla de energía en Salomón. Catalina está presa del miedo al ver llegar a Germán con la ropa y las manos bañadas en sangre.El pueblo ha amanecido lleno de escombros producto del aguacero de la noche anterior. En el confesionario, está Katty atribulada por sus sentimientos hacia Germán. Confiesa a Cervillo que está amando al demonio que habita en el alma de un hombre.

En la casa de Porras, Marlene humillada mira a Fulgencio después de que éste le pide que salga inmediatamente del lugar. Santiago, recordando la promesa que le hiciera a su padre, le hace saber a la exreina que será mejor que se retire y no se vean más. Katty se mortifica al saberse descubierta por Sandra, quien sabe que Germán pasó la noche con ella, y además vio rastros de sangre en su habitación. Fulgencio le revela a Cervillo el triste destino que embarga a su hijo Germán. Es víctima de su madre Sarah, quien maldijo al pueblo y Andueza está allí para perpetuar esa maldición.

Zoyla entra al misterioso cuarto de Katty, quien se mantiene inmóvil mirando por la ventana. La señora Méndez Pí se aterra al escuchar la risa diabólica de la mujer, además de presentarse como el mismo demonio. Luego de sufrir la decepción de mirar a Fede con Dayana, Julieta triste regresa a su casa. Virtudes, arrepentida de haber botado a su hija de la casa cuando llegó de Caracas, la recibe con un fuerte abrazo brindándole su protección. Dominando totalmente a Mesalina y luego de haberla golpeado brutalmente, Matute levanta el cuchillo sobre ella, cuando le va a dar la puñalada, la puerta que está a sus espaldas se abre para dar paso a Santiago, quien enardecido aparta a Matute de su débil esposa.

Julieta escucha a Dayana, quien le confía que aceptó la propuesta de matrimonio que Federico le hiciera. Fulgencio le confía que fue él, Germán Andueza, quien mató a la familia Páez. Ante la negativa de su hijo, Cruz le aclara que no los asesinó bajo su voluntad. En el bar, Luisa Elena le propone a la aturdida Mesalina que trabaje en su negocio, pues con su estampa podría ganar mucho dinero. Santiago que ha ido en busca de su esposa, le confía a Juvenal su preocupación por la joven. La señora Méndez Pí se impacta al mirar a Katty poseída flotando por encima de la cama.

Zoyla está boquiabierta al encontrar a Katty dormida flotando en el aire. Mientras en la casa de Marlene, Germán hace lo imposible por hacerse escuchar ante su esposa quien no entiende razones. En medio de la discusión, Andueza le aclara que el que estaba en la cama con Katty no era él sino el otro ser que lo domina. Federico ha traído a la cárcel la orden de excarcelación para Ramiro. Virtudes se muestra contrariada porque Odilo seguirá detenido. Vegas sale dispuesto a enfrentar a su hija por lo del embarazo, mientras Fede le comunica a Santos que ha decidido volver a casarse. Dayana le confía a Marlene la enfermedad que padece, al igual que su padre y su tía Luisa Elena. Suplicante le pide que no se lo revele a su papá porque ya él tiene suficiente con su dolor.

Luego de mirar a su esposa bailando al ritmo sensual al tiempo que hace un streap tease, Santiago se acerca al escenario y se lleva en brazos a Mesalina hacia el camerino del bar. Le advierte que no dejará que ella se falte el respeto exhibiéndose semi-desnuda mientras estén casados. Al anochecer, en su habitación, Marlene es sorprendida por la misteriosa visita de Catalina quien con cuchillo en mano amenaza con asesinarla si no deja en paz a Germán.En la habitación de Katty, Zoyla se aterra al encontrar en la cama, en lugar de la joven Monsalve, a un feroz perro negro que le muestra sus colmillos al gruñirle.

Germán está horrorizado al ver en lo que ha convertido a Katty. Mientras que, ella insiste en matar a Marlene recordándole a Andueza que es un mandato que él debe cumplir. En la sacristía, Cervillo, luego de ser asaltado por las dudas y confesiones que ha escuchado de Katty, indaga en Fulgencio por lo extraño que está el pueblo luego de su aparición. Cruz le revela que la maldición que pesa sobre Salomón es obra de una mujer. Se trata de la madre de Germán quien años atrás pactó con el propio demonio en esas tierras. Ya en su casa, Germán advierte a su esposa para que evite todo contacto con Katty. Tras saber que Santiago posee arrastre popular, pasión y sobre todo un motivo para aceptar el reto, Vegas, en compañía de Luisele, le propone a Porras ser su candidato para la Alcaldía del Pozo. Ramiro le advierte que necesitan una cuota de poder para lograr explotar las tierras que en sociedad compraron en la subasta.

La dama de púrpura tiene a Sandra inmovilizada, agarrada por el cabello y con el filoso cuchillo en el cuello. Katty, aún dormida, se remueve en la cama. Esto hace que la misteriosa dama descargue la puñalada sobre el cuerpo de Sandra quien cae muerta al piso. Germán se inquieta al leer una nota que Lara le entrega donde Katty le avisa que quiere verlo urgentemente. Ya en la habitación de Monsalve, Germán está muy impresionado al encontrar a la joven presa de una crisis nerviosa ante el cuerpo sin vida de Sandra. Santiago está asombrado al escuchar de Marlene que Cruz no la deja explotar las tierras sólo porque le está cobrando una deuda de amor que le quedó debiendo Armando Páez. Al creer que ella mató a Sandra, Katty –desesperada- pide ayuda a Germán, quien la abraza protector asegurándole que no dejará que le suceda nada. Él mismo se encargará del cadáver.

Santiago no puede evitar mirar con recelo a su padre al encontrar a su esposa dormida en su cama. Gandica al cerciorarse que Fulgencio ha permanecido en el hotel se retira. Cruz le aclara a su hijo que la razón de que Mesalina esté allí es por refugio, pues ella lo buscó al sentirse indefensa ante Matute. Luego de escuchar y creer la confesión de Matute, de que no fue él quien asesinó a Silencioso, Marlene le confiesa a Odilo que está muy cerca de saber quien cometió los asesinatos tanto de su hermano como de sus padres. Marlene está furiosa luego de descubrir que su esposo, por ayudar a Katty, está involucrado en el asesinato de Sandra.

La misteriosa mujer de púrpura le advierte a Marlene que no se separe de Germán. Sólo Andueza puede garantizarle a la exreina éxito y vida. La dama, luego de asegurarle que lamentará si deja a su esposo, la obliga a inhalar un pañuelo impregnado de cloroformo para así poder huir del lugar. Mientras Ramiro coquetea con su secretaria Gertrudis, Julieta intercede por él para que su madre lo perdone. Le hace entender a Virtudes que su padre es un hombre bueno, que está arrepentido de haberlas tratado mal. El desesperado Andueza, entre truenos y relámpagos, le pide a su padre que lo ayude, que lo libere de ese infierno en el que se está quemando.

Ante un Germán poseído, Fulgencio hace que se humille ante él, que muestre su arrepentimiento para que ceda su soberbia, pues del odio es que se alimenta el mal que lo acecha. Luego de luchar consigo mismo, Andueza cae de rodillas ante su padre quien, lo ayuda a levantarse. Marlene, Santiago y Dayana se impactan al enterarse por boca de Odilo que Germán ha escapado del calabozo. Entre tanto, sobre el sótano de la Diablera se proyectan los relámpagos que descarga el cielo. Germán desesperado pide perdón a Dios, confesando que mató a su madre porque ella le destruyó la vida. Luego de sufrir una severa crisis, Catalina en su celda es atendida por Carmona a solicitud de Odilo. Cuando el doctor la está auscultando la diabólica mujer con sus manos lo asfixia causándole la muerte. En su habitación, mientras duerme, Marlene es atacada por la dama de púrpura quien la amenaza colocándole un cuchillo al cuello.

Al saber por Lara que la madre de Germán vestía de púrpura, Marlene está preocupada e intrigada en saber quién será la misteriosa dama y cuál será su objetivo. Cuando Marlene, en compañía de Santiago, está a punto de llevarse a Katty para su casa, aparece el padre Barrientos quien interrumpe la salida. Catalina mantiene el control delante de Manuel fingiendo no ser afectada ni por el crucifijo ni por las oraciones. En su oficina, Odilo recibe una llamada telefónica donde le informan que han encontrado una evidencia en casa de Katty. El alcalde, sin decir nada a Páez ni a Porras, sale a indagar de qué se trata.

Barrientos, luego de elevar sus oraciones y rociar agua bendita en cruz sobre el cuerpo de Katty, respira aliviado pues la joven no manifiesta reacción de que algo pueda estar mal. Ante este hecho Manuel se retira. Catalina lo ve alejarse con una mirada diabólica. Deja escapar un grito de dolor al verse que donde le cayó el agua bendita hay quemaduras. Federico le presenta su futura esposa a Vegas. La reunión es interrumpida por Gandica quien entra para informarle a su superior que Germán Andueza ha sido localizado muerto. Katty, que sale de casa de Marlene para dirigirse a su habitación donde vivía con Sandra, es vigilada desde la acera de enfrente por Barrientos, quien, con Biblia en mano, se dispone a seguirla. La diabólica mujer percibe la presencia del cura.

Barrientos no puede evitar un gesto de impotencia al no lograr avistar a Katty, quien simplemente ha desaparecido en medio de la calle. Manuel entiende que debe actuar rápido o de lo contrario perderá el alma de Monsalve. En la Diablera, Germán lucha en su interior por vencer el maleficio. De pronto es sorprendido por la figura de su madre que lo horroriza. Barrientos les informa a Marlene y a Santiago que le practicará un exorcismo a Catalina para lo cual necesitará que ellos estén presentes.

Santiago no puede evitar sentirse consternado al ver a su padre al borde de la muerte. Fulgencio le advierte que se aparte de Marlene porque ese amor lo llevará a la tumba, pues ella está maldita. Porras se impacta ante la noticia de que su amada no es quien dice ser. Santiago no puede evitar sentirse consternado al ver a su padre al borde de la muerte. Fulgencio le advierte que se aparte de Marlene porque ese amor lo llevará a la tumba, pues ella está maldita. Porras se impacta ante la noticia de que su amada no es quien dice ser. Llegó el día del gran encuentro entre Sarah Gutiérrez y Santiago Porras. Él ignorando que Marlene tiene una hermana gemela, se impacta al notar que su enamorada ha cambiado de actitud. Viste con ropa muy sexy y –experta- fuma sensual un largo cigarrillo.

Santiago, que había dejado a Marlene en su cama en estado de shock, está asombrado al encontrarla –en el cuarto- activa como si no hubiera sufrido nada en la habitación de Katty. Al saber que ya nada la separa de Federico, Julieta sale dispuesta a luchar para recuperar a su gran amor. En compañía de Adriano, la joven Vegas se dirige a la oficina de Ramiro. Sus ojos no pueden dar crédito a lo que ve: Fede firma el libro de acta que lo une en matrimonio con Dayana. Sarah está impactada ante la propuesta de matrimonio que Santiago le hace. La impostora lo abraza para que él no vea su expresión, pues está muy intrigada. Porras a su vez, aprovecha para que ella no vea la punzada de dolor que siente él al recordar lo que su padre le dijo sobre la niña que nacerá.

Mientras Sarah (en el lugar de Marlene) está sorprendida ante la propuesta de matrimonio por parte de Santiago, riéndose le dice que no. A ella sólo le interesa poner a producir sus tierras y ganar las elecciones. A solas, le ordena a Lara que le prepare una reunión con los dos alcaldes de Salomón.Federico, luego de haber enfrentado a Santos por haberle mantenido en secreto que Julieta no es su hermana, se dirige a casa de Dayana dispuesto a acabar con su matrimonio. La joven Andueza al ver que perderá a su esposo, simula un desmayo.

Tras recibir instrucciones de Germán, Casimiro sigue a la supuesta Marlene. La astuta mujer se desaparece en medio del monte. Luego de saber que no son hermanos, se produce el primer encuentro entre Federico y Julieta. Ambos se miran enamorados. La joven Vegas, siembra la duda en Federico sobre si Dayana no lo estará manipulando con su supuesta enfermedad para retenerlo a su lado. Conmovida, Katty mira a Germán, quien asegura haber regresado para que estén juntos el resto de la vida, pues él está completamente enamorado de ella. Mientras a Germán lo agobia un gran dolor al escuchar en el pueblo que han asesinado a su hija. Federico en el calabozo palidece al ver que la presunta asesina es nada menos que Julieta.

En medio del caos que ha generado la extraña mirada de Sarah, hace que el humo que sale de la patrulla envuelva todo el ambiente. Mientras unos corren para apartarse del vehículo, otros intentan acercase. Lara advierte a Sarah que Germán está al tanto de que ella es la hermana de Marlene, por lo que le pide que tenga mucho cuidado. Cualquier descuido o error puede arruinar lo que han estado preparando durante tantos años. Sarah se encargará de Santiago como de Andueza, pues ninguno de ellos impedirá que su madre y ella cumplan la misión a las que han sido encomendadas. Mientras en la secta, utilizando la misma arma de la gemela, Marlene se prepara para imitar a su hermana Sarah y así escapar de allí. Está decidida a dar rienda suelta a su plan, le comunica a uno de los monjes que quiere ser como ellos.

En medio del mitin, Ramiro Vegas es acusado por Sarah –fingiendo ser Marlene- de participar en el asesinato de sus padres, Armando y Esther Páez, para quedarse con sus tierras, además de incitar al pueblo para linchar a Fulgencio Cruz. La impostora sonríe satisfecha ante la aclamación de la multitud al querer que muera el alcalde del Pozo. Sin que Sarah lo advierta, es seguida a prudente distancia por Santiago, quien está intrigado al ver que la mujer camina misteriosamente hacía las afueras de Salomón. Desaparece en la oscuridad sin que Porras lo pueda explicar. En casa de Virtudes, Ramiro llora completamente contrariado e impotente ante la triste situación de Julieta, pues a pesar de todo, él la quiere como a una hija. En tanto, en el Futbolito, Marianella le confía a Susana su sospecha en contra de Anita, pues cree que ésta última tuvo algo que ver en el crimen de Dayana.

Sarah, sin imaginarse el trágico destino que le espera, se escapa de la secta para dirigirse al pueblo y vengarse de Marlene. Al llegar a la orilla de la carretera, le pide al conductor de un vehículo, que en ese momento pasa, que le lleve hasta Salomón. La mujer se sorprende al descubrir que el ebrio conductor no es otro que Ramiro Vegas. El alcalde al verla y creer que se trata de Páez le dispara repetidas veces hasta que el cuerpo de la gemela cae desangrado en medio de la vía. Bajo las miradas de Lara y Luisa Elena, Marlene -confidencial- le narra lo vivido en la secta a Santiago. En el lugar descubrió que tiene una hermana gemela que la ha estado usurpando. Mientras en el templo satánico, las llamas devoran furiosamente todo a su paso, incluyendo a los monjes. Meses después, el panorama político en Salomón cambia. Marlene es proclamada gobernadora, Santiago es el nuevo alcalde del Pozo y Virtudes alcaldesa del Conuco. Mientras en Salomón, ha llegado el gran día en que nacerá la hija de Marlene.

En la oficina de Marlene, Santiago siente una ira incontenible al ver el símbolo de la secta dibujado con sangre en la pared. Mientras en su casa, la exreina recibe la incómoda visita de Mesalina quien se ofrece a cuidar a la niña. Barrientos no se explica quiénes pueden ser los que pintaron la estrella, pues el templo satánico quedó destruido por las llamas y todos los monjes murieron.  Porras está dispuesto a pelearse con Marlene con tal de bautizar a su hija, pues sabe que Lara y Luisa Elena no murieron en el incendio y puede ser que hayan formado un nuevo ejército de fanáticos. Mesalina se muestra muy preocupada y solidaria con la tragedia que vive Marlene.

Páez, aún convaleciente por el parto, se siente morir al Mesalina revelarle que Fulgencio Cruz, antes de morir, le advirtió a Santiago que si no bautizaba a la niña acabada de nacer entonces tendría que matarla con una daga. Entregado al alcohol, Ramiro llora -amargamente- al saber que no puede hacer nada por Julieta. Isabella se reúne con Luisa Elena y Lara en un escondido lugar en las afueras del pueblo. Le informa todo lo que ocurre en Salomón, en especial la desaparición de María Gracia, que aún no ha sido localizada. Luisele, está segura de que la niña aparecerá para volver con la secta, pero antes Marlene debe morir. Marlene que espera ansiosa el regreso de Santiago, quien salió en busca de su hija, se derrumba al ver que el hombre sólo trae una cobija de María Gracia. Evidentemente han perdido a la criatura.

Mesalina, al ser acorralada por el capitán León, justifica su presencia en el rancho de Tiburcia al decir que Serena fue quien le informó que la niña de Santiago estaba allí. Méndez Pí se aterra al saber que la niña fue secuestrada por las personas que mataron a sangre fría a Alejo y a su mujer. Mientras, Santiago en su desesperación se dirige a la Diablera a invocar el espíritu de su padre para que le dé una luz, o una pista que lo pueda ayudar a encontrar a su pequeña.

Temblando de miedo, Anita se arrodilla en el confesionario. Al tiempo que Cervillo la escucha, en los asientos de la iglesia, están Susana, Marianella y Simona quienes esperan, finalizada la confesión Marianella, en medio de todos, arma un escándalo culpando a Anita de la muerte de Andueza.Luisa Elena toma entre sus manos el estuche donde se supone está guardada la daga. Con el instrumento podrán iniciar a la niña y la gran Sarah volverá a reinar entre ellos, cuando le pasa la caja a Lara, el rostro de Luisele se transfigura de rabia al descubrir que se trata de una falsa daga.

Luego de acorralar a Marianella y a Simona, Cervillo visita a Anita. Quiere indagar si la confesión de la joven fue sincera o mintió por omisión. Ante la negativa de la muchacha, en haber participado en la muerte de Dayana, el padre, una vez más, le pide que diga la verdad. Los padrinos deberán comulgar antes de bautizar a Julio Federico. Anita -atormentada interiormente- llora desolada. Cuando le suplica al sacerdote que la deje en paz, en ese momento llega Virtudes quien se sorprende al saber que Anita es acusada de ser la verdadera asesina de la esposa de Federico, además de usurpar el puesto de Julieta para quedarse con el niño y con Fede. Santiago se sorprende al encontrar, en su habitación del hotel, a Mesalina, quien llora. Méndez Pí, temblando de miedo, le confiesa al hombre  que fue ella quien raptó a su hija de la cuna para vengarse de Marlene. No pudo soportar que la exreina tuviera lo que a ella un día le arrebató: un hijo de Porras. El exsacerdote –violento-  saca a Mesalina del cuarto.

Mesalina que entra –misteriosamente- a la habitación fría y negra donde está en una cuna -color púrpura- María Gracia, es espantada ante la figura de una dama momificada que yace en un cama cubierta de finos velos que se agitan cada vez más a medida que Méndez Pí se acerca a la bebé. De pronto la joven cambia su expresión y huye del lugar sin poder rescatar a la niña. Una extraña calma se apodera del recinto, dejando ver claramente el cuerpo de la momia, se trata de la propia Sarah Gutiérrez. En el templo, Santiago, siempre pendiente de que nadie lo vea, llega hasta la celda de Mesalina quien está impactada por lo presenciado en el cuarto mágico de la secta. En medio de su crisis le afirma a Porras que su pequeña está en esa habitación, al lado de una momia. Santiago le pide a la joven que se mantenga de pie, fuerte, pues ella es su única esperanza para recuperar a la bebé. Cuando se marcha, se proyecta en la pared la sombra de un monje que por su expresión de severidad da a entender que ha escuchado la conversación entre Porras y Mesalina. Luego de ser perdonada por Marlene, Sarah milagrosamente se recupera.

Sarah, luego de seguir a Isabella, es sometida por un monje, quien al creer que es Marlene la sentencia a muerte. Haciendo gala del poder que heredó en la secta, clava su fuerte mirada en los ojos del enemigo para debilitarlo, el hombre sale disparado hacia atrás movido por una fuerza invisible y cae al piso inconsciente. Sarah mira a su alrededor como verificando que nadie más la ha visto, antes de marcharse, despoja al monje de la túnica. Mientras, Anita se acusa delante de Odilo y Virtudes de ser la culpable de que Julieta esté presa, en el Footbolito, Susana se intriga al sorprender a la nerviosa Marianella con el diario de Dayana.

Al saberse descubierta por Solvencia, Sarah le confía que usurpó a su hermana para protegerla de la secta. Le aclara que María Gracia está viva, y la tiene su madre en un lugar seguro. Le pide que la ayude a seguir suplantando a Páez. En su momento oportuno la gemela llevará a la profesora a ver a su nieta y a Marlene. Felices celebran la liberación de Julieta, entre ellos están: Ramiro, quien aprovecha la ocasión para informar que se casará con Gertrudis, Virtudes junto a Odilo, Simona, Archie, Marianella quien no deja de mirar seductora a Federico, y Susana que la observa.

Sarah le advierte a Porras que la secta aún no está destruida, pues sus líderes, Lara, Luisa Elena e Isabella escaparon por una de las salidas secretas del templo.Además no descansarán hasta tener en sus manos a María Gracia. Santiago ante esta revelación le suplica a la gemela que lo lleve hasta su esposa e hija para ser él quien las proteja. Julieta sorprende in fraganti a Marianella, quien asfixia a Susana con una almohada por traicionarla. En Salomón, Odilo, Virtudes, Julieta y Federico esperan en la puerta de la cárcel a Anita, quien sale en libertad. El transcurrir del tiempo no se ha hecho esperar. Ahora una joven de 18 años, quien colma de felicidad su vida y la de su esposo, ha alcanzado por sus propios méritos esa distinción. Con humildad y orgullo presenta a su hija María Gracia Porras Páez, la nueva Reina de Corazones. Se trata de una bella joven que -en medio de aplausos- modela en la pasarela. Al terminal el desfile, Porras sube al escenario. Marlene y Santiago se funden en un apasionado beso detrás de su hija, mientras ésta mira agradecida al público.