¡Viva la Pepa!

López y Lunar caminan bajo la lluvia. Mariana, al ver que no hay nadie alrededor, se quita la blusa para escurrirla. Pepita hace lo mismo. Ambas empiezan a disfrutar de la lluvia. Luis Raúl, al ver a Pepita en la carretera, frena rápidamente el jeep. El momento le hace recordar el accidente. Al observar a Lunar, Graziani experimenta una erección. El joven grita emocionado que está vivo.

Al ver a Pepita, Pepa y Perucho se interesan en saber qué fue lo que le hizo el sádico.

Luis Raúl trata de explicar a Pepita el por qué de su reacción. De pronto, suena el timbre. Al abrir, Josefina se encuentra con Luis Ángel. La joven cierra la puerta inmediatamente.

Galán comenta a su mujer que vio a Graziani, lo cual lo hizo sentir un hombre fracasado.

María José participa a la familia Galán Lunar que ella los recibirá en su casa.

Luis Ángel aclara a Violeta que no le agrada que ella lo obligue a hacer el amor, pues el hombre es él. Perdomo, molesto, va a ducharse. De pronto, suena el timbre. La forense se sorprende al ver a Pepita.

Moncada se alegra porque descubrió la otra cara de Maneiro. Sin embargo, al recordarla metida en la jacuzzi, siente un poco de celos, pues admite que la mujer se veía realmente bella. En ese momento, Bencecry se sienta en la misma mesa que Jota Jota. Ismael pide al mesonero dos tragos, pues él tendrá una conversación seria con su colega.

Perdomo aclara a Gonzalo que no irá con Pepita Lunar para la parrilla, pues ellos terminaron. De pronto, se presenta Josefina. Ella manifiesta que asistirá al festejo del trabajo de su novio.

Moncada manifiesta a Maneiro que fue un placer ser su novio por un día, pero dada su actitud de desprecio hacia él, hablará con la señora de Bencecry. María José reta al hombre a decirle la verdad. Jota Jota se acerca a donde está Yiya. El manifiesta a la mujer que tiene algo importante que contarle.

Al salir del club, Pepita observa a Luis Ángel y a Luis Raúl peleando en las afueras del lugar. Pepa pide a su hija que haga algo, pues los hombres se están matando. Josefina, rabiosa, les grita que se maten. Los contrincantes se sorprende al escuchar a la joven, quien, además, prosigue su camino. Al ver a su hijo, Ulises se interesa en saber qué significa ese espectáculo.

Luis Raúl insiste en que Pepita acepte su oferta de matrimonio. La joven ya furiosa enfatiza que no lo quiere.

Iturriza hace saber a Pepita que está contratada para ser su secretaria.

Gonzalo pide a Pepa que, por favor, le diga la verdad. La mujer vencida por los ruegos de Iturriza confiesa que Pepita es su hija.

Bobby convence a Luis Raúl de robar una camioneta 4*4 que está justo al frente de la casa de su padre.

Pepita busca un diskette en su escritorio. De pronto, observa el bolígrafo perdido de Gonzalo. La joven, extrañada, se pregunta qué hace la pluma ahí. Iturriza, al ver la escena, requiere a la joven una explicación.

Jota Jota soporta la aplastante descarga de Bencecry. Mari Pepi , al presentarse en la oficina del Director, defiende el modus operandi de Moncada para salvar a la paciente, por lo que enfatiza que no aceptará represalias contra el médico.

Luis Ángel pregunta a Gonzalo cuáles son sus intenciones con Pepita. Iturriza manifiesta que la joven lo tiene loco de amor. Perdomo se enfurece. Gonzalo, al ver la reacción del joven, aclara que Josefina lo hace sentir un padre feliz.

Ismael encuentra a Maneiro y a Jota Jota muy cerca, casi en una escena romántica. El Director, con autoridad, requiere saber qué ocurre.

Rodríguez insta a Perdomo a retirarse del lugar, pues está muy alterado. Pepita pide a Luis Ángel que la ayude. Él, haciendo caso omiso a los requerimientos de Lunar, se retira con Rodríguez. Graziani echa en cara a Josefina que su novio no fue capaz de defenderla.

Perdomo explica a Iturriza que lo hizo porque Pepita está con él y media hora después se encuentra junto a Graziani. Por eso, resalta que no la quiere ver. Sin embargo, el Comisario ordena que se reconcilie con la joven, pues él le va a regalar una casa. Luis Ángel se muestra sorprendido.

Jeremías invita a María José a cenar. La mujer acepta. Al marcharse el hombre, Mari Pepi agradece a los santos esa oportunidad.